31 julio, 2012

Colisión.


No podía decirte que sí.
Ya sabía a lo que venías incluso antes de verte a los ojos.
Te iba a romper el corazón en mil pedazos, y por eso lo postergué y lo postergué y lo postergué...

Todos los eventos ocurren sucesivamente, uno tras otro, resultando en un mapa mas grande y se van armando y posicionando como una red que se enreda más y más, más y más, hasta que... la red se rompe.

Me sentí acorralada entre mis propias palabras.
Mi cabeza intentaba recordar qué era exactamente lo que había escrito, para no decir nada más ni nada menos que lo que ya estaba dicho.
El momento estaba allí, podía sentir como los labios exhalaban las palabras... Sí.
-No.

Por favor, te imploro que dejes de leer esto.
Nunca estuvo destinado para ti.
Si escribí alguna vez con tanta soltura y libertad no fue por egoísmo ni rabia, y no fue para atacarte en alguna manera.
Nunca lo escribí para ti.
Sólo es para mí.
Lo siento si te herí.

Esto es lo que pasa cuando dos cuerpos chocan.
Cuando dos cuerpos colisionan, dos corazones se rompen.



26 julio, 2012

Engañada.


Ni siquiera sé cómo me siento.
No. Mentira.
Sí sé como me siento.
Me siento traicionada.
Literalmente engañada.
Me siento justamente como si me hubiesen puesto el gorro.
No quiero que me hables.
No quiero que nos juntemos.
No quiero nada de ti.
Y no quiero escuchar lo inocente que suena que me digas que no somos nada.
Porque si no fuéramos absolutamente nada no me sentiría así.
No puedo creer que todo este tiempo seguí pensando todo eso.
Sin saber nada.
Es increíble lo que hace la ignorancia.
Realmente es una bendición.
Ahora si puedes estar seguro de que nunca va a pasar.
Nunca.
Porque nunca me había sentido más humillada en toda mi vida.
No puedo escuchar nada de lo que dices ni leer nada de lo que me escribiste sin pensar en...

Deja de pedirme que hablemos.
No tenemos nada que hablar.

08 julio, 2012

Decepción.


¿Qué puedo decir?
Creo que uno nunca deja de conocer a las personas.
Resultó ser alguien muy distinto al que yo creía y quería, y me duele pensar que todo este tiempo fue así y yo no me di cuenta de eso.
Sé que lo atribuirá a la razón más estúpida, simple y predecible, pero la verdad, va mucho más allá.
Todo este tiempo se quejaba contra alguien que es exactamente igual que ella, con las mismas aspiraciones, pensamientos despectivos hacia los demás y expresiones encubiertas.
No me digas que no es así.
No se es hipócrita con la gente que uno quiere.
No se le miente a la gente que uno quiere.
No se finge con la gente que uno quiere.
Y es justo así.
Nunca te importó y nunca la quisiste.
Y justo por esto último, vas a seguir pensando en esa razón barata y simplona.

Te jactas de lo mal que lo pasan pero no haces nada por revertirlo ni piensas en alguna manera que lo que tú pides o exiges lo provoca, aunque sea en alguna mínima parte.
Está mal, pero no tan mal como para que no me de lo que quiero.
No des razones irrelevantes y mal hechas sobre esto. No vale la pena.
De hecho, nunca has hecho algún comentario al respecto.
Quizás no debería causarme nada a , pero aún así, me decepcionó increíblemente darme cuenta que una persona que conocía desde hace tanto tiempo es en realidad tan diametralmente distinta a como yo creía.
Lo que digas ya no significa mucho.
Lamento haber perdido a alguien.
Y a pesar de que muchas veces he dicho que hay que aceptar en la gente que queremos lo bueno y lo malo, no puedo aceptarlo cuando lo malo mancilla completamente todo lo bueno.
Cuando lo malo ironiza todo lo bueno.
Cuando lo malo hace dudar todo lo bueno.

No te vas a dar cuenta de nada, creo yo.
De nada.
No voy a decirte nada, y sólo silenciosamente, quizás, seguirás pensando qué cosas sobre mí.
Pero aún así, fingiremos ambas, desde ahora, como lo vendrás haciendo tú desde hace cuánto tiempo.
Lamento haber perdido a alguien.


02 julio, 2012

Reflejo.





















En esta vida de sonidos y ruidos, de imágenes y luces, de olores y sabores, risas y tristezas, momentos especiales y banales, a veces todo pasa demasiado rápido.
O quizás no a veces.
Quizás siempre pasa demasiado rápido.
Esta persona que me mira fijamente no se parece en nada a mí.
Esta persona que mueve los labios al compás con los míos.
Que me sonríe como yo a ella.
Que me mira con extrañeza y hace gestos imperceptibles para los demás.
No nos parecemos en nada.
Me siento igual que como me sentía antes.
Ayer. El año pasado. Hace cinco años.
Todo es igual.
Pero el tiempo pasa corriendo como si llegara tarde a alguna parte, recordándome que soy igual a ella.
Que soy esa que me sonríe.
Esa que me mira fijamente.
Aparentemente somos la misma persona.

A veces tendemos a pensar que no somos como nos proyectamos ante los demás, esperando que el resto lo comprenda y nos busque más allá de las apariencias, pero nosotros no hacemos eso con los demás nunca. Hacemos excepciones con nosotros pero no hacemos eso con los demás.
No puedo esperar que el resto entienda que no me parezco en nada a mi reflejo.
Que no soy para nada lo que parezco.
Porque, para ser muy honesta, yo no hago eso con ellos.
Su imagen es una de las cosas que más los caracteriza en mi cabeza, y toda su personalidad va asociada a ella. Ellos son su imagen.
Así que supongo que no puedo culpar a nadie.
Simplemente es así.
Somos nuestros reflejos, lo queramos o no.
Pero aún así, no me parezco en nada a ti.


01 julio, 2012

Excusas.


No me des más excusas inútiles de por qué llegas tarde.
De por qué no contestas el teléfono.
De por qué te olvidas de las cosas.
No necesito mentiras nerviosas e improvisadas que se arman mientras las enuncias.
No me des más excusas fingidas y falsas.
Yo sé por qué.
Sé por qué llegas tarde.
Sé por qué no contestas el teléfono.
Sé por qué te olvidas de las cosas.
Lo sé todo.
Escucho todo.
Veo todo.
Veo el panorama completo y simplemente no digo nada.
Veo como casi todos juegan a dos bandos, dicen cosas y hacen cosas que dicen que no hacen ni dicen. Una vida de hipócritas.
Lo veo todo y no digo nada.
Ya todos saben.
Todos saben que todos son hipócritas y nadie dice nada.
Nadie dice nada porque son todos hipócritas.