En días como este me siento atrapada en mi propio cuerpo.
Manos atadas por la espalda y una cinta en la boca.
Tengo tanto que podría darte, tanto que te caería como anillo al dedo.
Me hace odiarme a mí misma.
Por no ser suficiente.
Cada día compites contigo misma por quién hace más el ridículo.
Eres patética.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si vas a dejar un comentario -lo cual dudo seriamente-, no critiques ni insultes mis palabras, o estaré complacida de borrar las tuyas!